Kirei Nozui

Kirei Nozui 26 años Hombre Investigador CCG

Para los cercanos es llamado Kirito, no obstante, en el CCG es conocido como "Ghoul Sniper", y en el ámbito Ghoul como "Somber Dove".


Apartamento remodelado en el sector trece con seguridad incorporada. Un coche adaptado para la ciudad con GPS y sistema de rastreo. Teléfono vía satélite con geolocalización. Gabardina personal de color negro.


Vive en el distrito número 13 aunque tiene movilidad por toda la gran urbe de Tokyo a nivel personal. También puede viajar a dependencias internacionales si así se requiere.


Este quinque se compone de dos espadas duales Kan-Dao. Dos falcatas chinas compuestas por el mango de material Q y hojas diseñadas a partir del Kakuhou de un ghoul.
De tipo Koukaku, éstas son sólidas, fuertes filos capaces incluso de atravesar metal. Su longitud total es de 76 cm cada una, siendo el mango de 16 cm, con gruesa empuñadura para una mayor maniobrabilidad y un mejor manejo. La alta concentración de células RC del kagune usado recubre la capa externa, dándole robustez a cada espada.
Los mangos de ambas están teñidos en gris metalizado, sin embargo, las hojas son de un color azul cobalto mostrando pequeñas ramificaciones carmesí intenso a lo largo de todo el filo irregularmente. Tiene brillantes óvalos rojos a sendos lados y la zona cortante adquiere una tonalidad majorelle.
Una perfecta obra de arte arrebatada a un ghoul conocido como el “asaltacunas” que cazaba embarazadas para comerse el fruto de sus entrañas, sus fetos, dejando a las mujeres desangrarse en el suelo. Fue capturado y ejecutado por el mentor de Kirei, estando éste presente, y desde entonces éste ha sido y será su quinque principal.



Kirei es un hombre de estatura promedio, en torno al 1’80 m. De complexión esbelta, pesa 78 kg. Ostenta una trabajada masa muscular gracias al entrenamiento constante al que se somete, sin embargo, no alcanza la categoría de culturista ya que no tiene interés de llegar a ese punto. Luce una piel bastante clara, sin toques morenos propios del bronceado y rasgos mixtos entre asiático y caucásico. Sus facciones más representativas son sus ojos y la cabellera, negra como el carbón.
Dichos orbes parecen estar vacuos de vida ya que son de un azabache obscuro e insondable, lo que le otorga una mirada penetrante y bastante seria. Su rostro, a la par que su vista, tiene unos toques perfilados y marcados que le dan total severidad a su semblante. Presenta una fina barba casi imperceptible fruto del descuido de su imagen. No obstante, sus blancos dientes demuestran cierto interés por el aseo personal.
Tiene unas manos con dedos finos, lo cual le favorece al llevar a cabo delicadas tareas. Sus piernas, trabajadas sobre todo, le conceden mayor agilidad en carreras sin obstáculos y persecuciones. Su abdomen muestra una apariencia lograda gracias a los abdominales que marca y su pecho define levemente unos pectorales.
Sus cabellos, atezados como la más oscura noche, se revuelven sin control alguno en todas direcciones, dejando caer un flequillo de escasa longitud.
Su vestimenta más característica es reconocible por el negro. Pantalones, zapatos, chaleco y corbata de ese color. También una camisa grisácea que no desentona en aquel mar zaíno. Y ante todo, su gabardina, oscura y atezada, aún más que sus ropas, de un negro intenso. Ésta última está habilitada para guardar su quinque.
Sin duda un hombre que a simple vista se ve normal y corriente.




Kirei Nozui fue siempre, desde su niñez, un hombre con pretensiones de heroicidad, aquel que protege a la humanidad. Destaca el distanciamiento que llevó a cabo de sus emociones, las cuales considera obstáculos ante una meta clara. Intenta matar a la mayoría de sus sentimientos, actuando como la máquina que es el “Somber Dove”. Se las ha arreglado para dedicarse exclusivamente a cualquier deber sin mostrar ninguna señal de vacile emocional, aunque es propenso a derrumbarse en momentos de extrema tensión sensitiva. Considera necesaria la carencia de seres cercanos ya que es con ellos con los que más daño se le puede causar al ser humano.
Su principal creencia radica en la no discriminación del sacrificio. Para él, toda vida está en igualdad de condiciones y elegir el camino que conlleve menos muertes siempre será el correcto.
No recibe satisfacción ante la consecución de sus objetivos ya que la ve como burla de un éxito de resolución calculada.
A la hora de llevar a cabo una tarea, todas las personas dejan de serlo para convertirse en meras herramientas, útiles para lograr un objetivo.
Su mente funciona a niveles acelerados, siempre calculando los posibles resultados de sus acciones. Es incapaz de actuar por instinto, ya que considera éste como una inconsciencia desmedida que conduce a errores. Confía en la probabilidad y en la estadística sin embargo suele barajar las menores probabilidades antes de darse a las mayores. Desconfiado por naturaleza, este cazador de ghouls no entabla relaciones íntimas ni sexuales con desconocidos.
Fumador desde hace años, consume tabaco siempre que puede pero nunca en horas de trabajo. Tampoco lo hace cuando viaja, simplemente para relajarse. Es capaz de controlar fácilmente su adicción gracias a su voluntad férrea.


La vida de este personaje siempre fue bastante curiosa. Kirei Nozui no es el nombre original de este sujeto, sino que en realidad fue llamado Kirei Belgrano, un joven nacido al sur de Suiza. Su madre, nipona, era investigadora del CCG destinada a Europa mientras que su padre, italiano, era un alto ejecutivo de una empresa internacional. Durante su crecimiento en este pequeño país, Kirei aprendió cuatro idiomas diferentes, Alemán, Inglés, Francés e Italiano, siendo el Japonés una lengua relegada para uso casero. La prematura muerte de su padre a causa de un cáncer le hizo trasladarse junto a su madre a su país natal, Japón, con tan solo 12 años. Estudiando ahora en un instituto de Osaka, al joven no le quedó otra que aprender la lengua oriunda a la fuerza. Siempre se le conoció como un muchacho atlético y jovial que superó la muerte de su padre, pero en verdad, Kirei se refugiaba en el único pilar que le quedaba en la vida, su amada madre. Cambió entonces su apellido al materno, Nozui y desde entonces se sintió completamente integrado en aquel nuevo mundo.
Obtuvo su graduado escolar a los 17 años, un año antes de lo previsto. Ya en el nivel de educación terciario se trasladó a Tokyo, donde estudió la carrera universitaria en antropología. Esta ciencia fue uno de sus mayores intereses, el poder conocer los diferentes desarrollos de las diversas comunidades humanas. En su primer año de carrera, con 18 años, su madre contrajo de nuevo matrimonio con un hombre de bien, un trabajador más del montón, humilde y sacrificado. A Kirei siempre le pareció un buen tipo.

Cuando conoció el verdadero trabajo de su madre comenzó a tomar mayores precauciones y a llamar más a menudo. Sentía preocupación frente aquel oficio.
En su final de carrera, con 23 años, sus actuales padres se desplazaron desde Osaka hasta Tokyo con la intención de asistir a la graduación de su retoño. En el trayecto, sendos sufrieron un fatal accidente al despeñarse una roca sobre la carretera y aplastar el vehículo así como los cuerpos de los pasajeros.
Sin embargo, aquella no era más que la versión oficial. Posteriormente al suceso, el CCG se puso en contacto con Kirei comunicándole la verdadera muerte de sus padres, a manos de un ghoul investigado por su madre. Tras esta actuación imprudente, el Choul fue capturado y ajusticiado y debido a ello, el CCG se hizo cargo de la manutención de aquel hombre como dicta su reglamento.
Sumido en una profunda depresión, Kirei se dio cuenta de un hecho, cuantos más allegados tengas, más vulnerable serás al sufrimiento. Desde aquel día, este joven cambió. Se propuso salvar al mundo, librarlo de aquella epidemia que era la raza ghoul. Limpiar la faz de la tierra, evitar que fueran devorados. Pero siendo realista, Kirei mismo dice “No creo que sea posible salvar a todo el mundo. Sólo quiero salvar a tantos como pueda”. Así entró a formar parte del Centro de Contramedidas Ghoul.

En su primera misión, acompañó como operario de campo a un grupo de investigadores. Conociendo bien la zona, al sur de Tokyo, indicaba los posibles escondites de una organización Ghoul. Durante una de las múltiples redadas que se llevaron a cabo, descubrieron al verdadero artífice de aquella institución ilegal y relegado a la retaguardia, a Kirei se le entregó un fusil para cuidar la retaguardia entre que aquellos más capacitados combatían al sujeto. El Koukaku de aquel inhumano ser detenía con facilidad las ofensivas de los investigadores, haciendo de la pelea una ardua tarea que mermaba las capacidades físicas de los combatientes. Cuando uno de los compañeros de Kirei estuvo a punto de ser rematado fatalmente, los dedos de Kirei accionaron el gatillo y una bala penetró la sien del Choul dejándole caer al suelo. La distracción constante de los investigadores fue suficiente para que el imberbe muchacho acabara con la vida del objetivo, el “Ghoul Sniper” lo llamaron desde entonces. Fue congratulado y ascendido, obteniendo así su quinque actual.



-No consume ni alcohol ni drogas, tampoco bebidas energéticas ni refrescos, solo agua.
-Sigue una rigurosa dieta desde hace años para mantener su complexión.
-Tiene un tatuaje de color rojo en la mano derecha aunque se encuentra ya casi borrado.
-No repara en los métodos, confía fervientemente en que “el fin justifica los medios”.
-Le gustan los climas fríos más que el calor pesado.
-Apasionado por su trabajo, investiga además para una tesis el origen de la raza Ghoul.
-Es un apasionado de la literatura de ficción, sin embargo, en el ámbito musical se decanta por la clásica.
-Dicen que su presencia incomoda, aunque él no se percata de ello.